A todos nos ha pasado: simplemente no se puede cambiar de hábitos porque la rutina diaria lo impide. Te damos algunas claves que te ayudarán a hacer cambios positivos en tu vida diaria.
Vivimos un estilo de vida donde el “Estoy muy ocupado” es una frase común del día a día. Corremos de un lado a otro, tenemos citas, eventos y trabajos que demandan que estemos a tope. Ya sabemos que la falta de ejercicio físico además de provocar por sí mismo un importante daño a nuestro sistema cardiovascular, contribuye a padecer obesidad, hipertensión, colesterol entre otras enfermedades.
Hoy es un buen momento para concientizarnos sobre lo importante que es tener un estilo de vida saludable. El ejercicio físico bien programado y de acuerdo tu capacidad física te ayudarán a mejorar tu salud y poder realizar todos los planes, proyectos, tareas de tu vida diaria. Si nunca te has apuntado a un gimnasio, o si ya hace mucho que no te ejercitas y no tienes idea de cómo iniciar, aquí te doy 5 tips para que logres mantenerte motivado en este nuevo viaje de la vida FIT.
1. Elige una rutina básica
Realiza ejercicios multiarticulares (sentadillas, press de banca, peso muerto, press militar) y no te desesperes ni intentes ejercitarte con todos los aparatos que están en el gimnasio. Es muy común ver novatos inscribirse y desde el primer día parece que quieren terminar desmayados. Lo importante no es entrenar más sino entrenar mejor. Si eres principiante, lo ideal será que tu rutina tenga una duración de una hora.
2. Ponte metas REALISTAS
Si estas en sobrepeso u obesidad, ten presente cuanto tiempo te tomó acumular esa grasa y cuánto has durado sin ejercitarte. Con esto puedes considerar que tu pérdida de peso y tu aumento de músculo no sucederán de la noche a la mañana. En algunos casos podrás ver los primeros resultados a las 6 semanas. Una meta realista te mantendrá motivado ya que será factible alcanzarla.
3. Entrena con un compañero
Esta sugerencia va para aquellos que les parece aburrido el gimnasio. Un compañero que tenga metas parecidas a las tuyas podrá ayudarte a que te comprometas. El compañero de gym estará ahí contigo y podrá hacerte observaciones mientras te impulsa a dar más y que mejor que tener alguien que te ayude a sacar esas últimas repeticiones de press de pecho, ¿no crees? Más que cualquier otra cosa sentirás motivación y compromiso.
4. Organiza tus horarios
Seamos honestos, una de las principales razones por la cuales faltamos al gimnasio es porque decimos que no nos alcanza el tiempo. Y bien, si ya sabes cuál es tu talón de Aquiles, entonces organiza tu semana desde el domingo. Si ya conoces a la perfección tus horarios y estableces tus compromisos de la semana podrás encontrar la manera de escaparte esa hora destinada al gimnasio. El éxito en un programa de entrenamiento está en la frecuencia con la que entrenes, es decir, menor frecuencia, menores resultados. Cuando eres principiante bastará con 3 días para empezar e ir gradualmente aumentando los días de entrenamiento.
5. Recuerda porque iniciaste
Es muy común que los primeros 3 meses la mayoría de los que se anotan al gimnasio terminen por abandonarlo. Esto se debe a que por una u otra razón le das prioridad a otras cosas y dejas de lado tu entrenamiento. En este punto, cuando estés al borde de abandonar recuerda porque iniciaste, repasa todas y cada una de las razones por las que te anotaste en el gimnasio. Recuerda que estás cansado de estar en sobrepeso, flácido o sin fuerza. La motivación principal para seguir y la más valiosa vendrá siempre de ti, de tus ganas por querer cambiar tu cuerpo.
Espero que tomes en cuenta alguno o todos estos puntos para que inicies ahora con todas las ganas y no solo logres esa meta que tienes de verte espectacular sino que además adquieras hábitos saludables permanentes.
Fuente: estrategiaynegocios.net