MARSHA, el hábitat vertical para la vida en Marte galardonado por la NASA.

El proyecto de AI SpaceFactory fue reconocido con el primer lugar en el Desafío del Centenario de la agencia espacial de los Estados Unidos.

La estructura podrá ser construida con materiales reciclables disponibles en la superficie de Marte y serviría de refugio para los primeros exploradores del planeta rojo.


El proyecto de AI SpaceFactory, agencia especializada en arquitectura y tecnología, ha sido el ganador del primer lugar en el Desafío del Centenario de la NASA con la propuesta MARSHA, un hábitat de forma vertical que ofrece una visión de cómo sería el futuro de la vida humana en Marte.

Una estructura habitable creada con tecnología de impresión 3D y destinada a acoger a los primeros humanos que visiten Marte, fue seleccionada por la NASA como el mejor diseño desarrollado con tal propósito, informó el pasado lunes Ai Space Factory, el equipo ganador.

El proyecto, que recibió el nombre de MARSHA, compitió contra más de 60 participantes en el marco del concurso 3D-Printed Habitat Challenge ('Desafío de hábitats impresos en 3D', en inglés), promovido por la agencia espacial estadounidense. Sus autores, establecidos en Nueva York (EE.UU.), recibieron 500.000 dólares como premio.


Tanto la firma como su proyecto fueron elogiados debido a su inteligente uso de la materialidad, ya que su construcción se desarrolló con base en un compuesto de basalto biodegradable y reciclable, derivado de materiales naturales encontrados en la superficie de Marte.



El diseño incluye ventanas en cada una de sus plantas, lo que, además de ofrecer en conjunto una vista panorámica de 360 grados, recrea una luz circadiana de manera similar al cambio natural de luminosidad durante el día y la noche en la Tierra. 

De este modo, sus creadores pretenden maximizar el cuidado de la salud de los futuros habitantes del refugio.




Sus creadores construyeron un prototipo a escala, mediante una tecnología automatizada que prácticamente no requiere de intervención humana, completando el proceso en apenas 30 horas. 

Luego, la estructura fue sometida a pruebas de la NASA para comprobar su resistencia ante la presión, el humo y los impactos.

"Es liviano y es fuerte, como un avión", expresó Lex Akers, decano de la Escuela Caterpillar de Ingeniería y Tecnología de la Universidad de Bradley (EE.UU.) y uno de los jueces del concurso. Y concluyó que esas características "serán muy importantes para este tipo de hábitat".


Para cumplir con las exigencias del concurso —que exigía construir las viviendas utilizando materiales disponibles en la superficie marciana—, los autores del proyecto demostraron que MARSHA puede ser construida en base a un compuesto de basalto de biopolímero, un material biodegradable y reciclable derivado de elementos naturales presentes en el planeta rojo.